Schumacher, el inigualable
Cuando hablamos de Michael Schumacher, no estamos hablando de un piloto cualquiera, nos referimos al piloto más laureado de todos los tiempos. Caracterizado por su gran carisma, su bondad y, sobre todo, su velocidad, este alemán logró ni más ni menos que siete títulos mundiales a lo largo de su carrera. Además, tuvo la oportunidad de pilotar para el equipo más grande del deporte y obtener con él cinco campeonatos, Ferrari.
Pocos pudieron hacerle frente, y solo un piloto logró superarle en igualdad de condiciones, Fernando Alonso, con el cual Michael vivió una de las mayores rivalidades de la historia. Pasando a su trayectoria, debo señalar que el heptacampeón se unió a la categoría reina en la temporada 1991 de la mano de la escudería Jordan. Allí desde muy joven sorprendió a Flavio Briatore (quien en el futuro descubriría a Fernando Alonso) y forjó un asiento en 'El Gran Circo'.
Su primer título mundial llegaría en el año 1994 con el equipo Benetton por tan solo un punto de ventaja respecto a su perseguidor, Damon Hill. Tan solo un año después, se convertiría en campeón del mundo con la misma escudería, la cual dejó ese mismo año para unirse a 'El Cavallino Rampante'.
Ya en Ferrari, el alemán tuvo que esperar cuatro años para lograr el tricampeonato, pero merecieron la pena, ya que a partir del año 2000 Ferrari entró en una de las épocas más dominadoras nunca antes vistas. Evidentemente, durante cuatro años el equipo italiano fue imparable y el alemán se convirtió en heptacampeón del mundo.
Entonces llegó el bautizado como su heredero, Fernando Alonso, quien durante las temporadas 2005-2006 logró arrebatarle a 'El Káiser' los campeonatos a través de batallas espectaculares para la historia. Este hecho hizo que a finales de 2006 Schumacher anunciase su retirada, la cual se dio en la casa de Ferrari, Monza. En ella, Alonso fue sancionado injustamente por molestar al otro piloto de Ferrari, a esto se le denominó el último favor a Schumacher.
Como último dato, cabe destacar que la leyenda regresó a la Fórmula 1 en la temporada 2010, donde aguantó dos años más sin grandes éxitos debido al amor que tenía por este deporte. En 2013 tuvo un grave accidente y a día de hoy sigue peleando por sobrevivir, por lo que no veo mejor forma de acabar esta autobiografía que con el ya popularizado #KeepFightingMichael.
Unai Cano
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| Imagen seleccionada de una web de wallpapers. |
Su primer título mundial llegaría en el año 1994 con el equipo Benetton por tan solo un punto de ventaja respecto a su perseguidor, Damon Hill. Tan solo un año después, se convertiría en campeón del mundo con la misma escudería, la cual dejó ese mismo año para unirse a 'El Cavallino Rampante'.
Ya en Ferrari, el alemán tuvo que esperar cuatro años para lograr el tricampeonato, pero merecieron la pena, ya que a partir del año 2000 Ferrari entró en una de las épocas más dominadoras nunca antes vistas. Evidentemente, durante cuatro años el equipo italiano fue imparable y el alemán se convirtió en heptacampeón del mundo.
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| Foto sacada del diario ABC. |
Como último dato, cabe destacar que la leyenda regresó a la Fórmula 1 en la temporada 2010, donde aguantó dos años más sin grandes éxitos debido al amor que tenía por este deporte. En 2013 tuvo un grave accidente y a día de hoy sigue peleando por sobrevivir, por lo que no veo mejor forma de acabar esta autobiografía que con el ya popularizado #KeepFightingMichael.
Unai Cano
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